El Home Office

Por Jorge Fanuvy Núñez Aguilera.–

Dedicado a Mavy Alhelí
por sus dos primeros años de vida.

Antes de comenzar con la siguiente disección, es importante tomar como antecedente, para el presente ensayo, los párrafos introductorios que se han compartido en un artículo anterior: Un año no pasa en vano. Una reflexión en torno a ‘Classroom’. Tomando esto en cuenta, vamos ahora a compartir, para corresponder a una deuda, y considerando a “Classroom” como una primera entrega y a este ensayo como una segunda (que no una segunda parte, porque se trata de otra pieza no obstante que sucedió en el mismo contexto en el surgió la que fue referida en la primera entrega) que derivó de un contexto, ambiguo y polémico, que se corresponde con este presente pandémico y que se ha vivido entre los años 2020 y 2021 trayendo consigo un cambio rotundo de la cotidianidad y que la humanidad ha padecido a causa del enclaustramiento asumiéndolo como una nueva y necesaria condición de vida.

La reflexión que se comparte parte de esta segunda xilografía, que también se corresponde con ese presente detenido solo que la atención debe estar ahora centrada en aquellas personas que han tenido que llevar la oficina a casa para convertirla en su “Home Office”. Sin duda, sabemos que ha sido un “concepto” relacionado con la vida que cobra un gran protagonismo con fuerte presencia a nivel mundial durante los años 2020 y 2021. Concepto que muchas personas asumimos, y algunas que posiblemente todavía lo siguen asumiendo, y otras tantas que siempre lo han tenido presente. Un tipo de situación que ha sido construida partiendo de la realidad y de la experiencia personal y que, de acuerdo con el contexto, amerita ser estudiada, ahora a la distancia de un año de su ejecución, tratando de compartir algunas reflexiones en relación con lo formal y conceptual. El recorrido contemplará los siguientes apartados: origen, antecedentes, el proceso, resultados, consecuencias y notas.

  1. Origen
Cuento para Mavy / Fotograma de video multimedia 10/05/2020
«Cuento para Mavy» / Fotograma de video multimedia 10/05/2020. Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©

Al igual que sucedió con “Clasroom”, necesitamos remitirnos al pasado con “Cuento para Mavy”, ya que la idea concreta surge también en ese cuaderno de dibujo que en sus páginas guardaría el registro de los días previos al nacimiento de mi hija (mayo de 2020) y que también dio como resultado un cuento que, con dibujos y letras, relata el contexto y los primeros días de la pandemia en México, tras ser declarada la emergencia sanitaria, del Covid-19[1]. El cuaderno también contiene algunos momentos antes de la pandemia ya que el contenido de esa libreta comenzó a realizarse a finales del año 2019, como producto de un ejercicio colectivo que en un principio involucró a los integrantes de un taller de dibujo que en aquel entonces tenía a mi cargo. Uno de los objetivos más importantes se centraba en –además de fomentar un hábito por el dibujo, por la experimentación y la investigación– incentivar a los alumnos a que, de manera cotidiana, realizasen ejercicios abordando temas libres, o que estuvieran relacionados con su entorno y con proyectos personales que involucraran problemáticas a resolver o que estuvieran sujetos a planteamientos relacionados con objetivos y técnicas que se practicaban en las sesiones; se trataba de fomentar la práctica diaria, con la idea de que, de manera metafórica, se pudiera poseer el tiempo para materializarlo en cada página, anotando los días y proponiendo que se diese una comunión libre, dinámica y diversa entre el texto y la imagen.

Una de las páginas de “Cuento para Mavy” pastel graso y acuarela / cuaderno bitácora, tamaño carta. 27/04/2020
Una de las páginas de “Cuento para Mavy” pastel graso y acuarela / cuaderno bitácora, tamaño carta. 27/04/2020. Jorge Fanuvy Núñez Aguilera © 

Así es como “El Home Office” aparece en la sección de la destrucción, de los autorretratos, de lo clasificado como “erizo”, la parte cruda y bizarra, pero que contiene al humor como un refugio que se vuelve necesario ante la realidad aberrante que en su momento parecía pasajera. Cada dibujo tiene su fecha, sin embargo, la organización del cuento no tiene la intención de narrar de manera convencional la secuencia de los días, más bien, la narrativa fue surgiendo de manera aleatoria, de hecho, con ese autorretrato, sin que fuera parte del plan, quedaría el registro, en la fecha de elaboración, del mes previo al nacimiento de nuestra hija Mavy.

  1. Antecedentes

Antes de continuar con la génesis de: “El Home Office”, es pertinente dar a entender que la pieza no solo se presentó como una mera ocurrencia, podría ser, si acaso, un impulso o una necesidad, pero conviene desentrañar y descubrir que, detrás de ese personaje, han existido ciertos antecedentes en mi producción gráfica que resulta inevitable relacionar, tales como:

Algunos de los grabados de la serie: “Dícese de la fauna urbana mexicana”. Xilografías a la plancha perdida 60 cm x 40 cm, 2002-2003
Grabados de la serie: “Dícese de la fauna urbana mexicana”. Xilografías a la plancha perdida 60 cm x 40 cm, 2002-2003. Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©
Grabados de la serie: “Dícese de la fauna urbana mexicana”. Xilografías a la plancha perdida 60 cm x 40 cm, 2002-2003
Grabados de la serie: “Dícese de la fauna urbana mexicana”. Xilografías a la plancha perdida 60 cm x 40 cm, 2002-2003. Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©
Grabados de la serie: “Dícese de la fauna urbana mexicana”. Xilografías a la plancha perdida 60 cm x 40 cm, 2002-2003
Grabados de la serie: “Dícese de la fauna urbana mexicana”. Xilografías a la plancha perdida 60 cm x 40 cm, 2002-2003. Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©

Mis primeros intereses y planteamientos en la gráfica que tienen como cimientos los que están relacionados con la vida en la urbe y con la crítica social. Por ejemplo, la serie: “Dícese de la fauna urbana mexicana, el libro oficio ambulante”, fue realizada durante los años 2002 y 2003 dentro del IX Seminario de libro alternativo en la entonces ENAP, UNAM[2]. El libro hibrido, contiene una serie de 16 xilografías a color, realizadas con la técnica de la plancha perdida y la temática, ligada con el registro e interpretación, de los oficios ambulantes mexicanos. El contenido de la propuesta parte de todo ese ímpetu que prevaleció durante el siglo XIX en la gráfica mexicana en cuanto a la representación del costumbrismo y de lo pintoresco que varios artistas supieron retratar con gran maestría (aunque más bien, la mirada y el estudio es aún antes, en el siglo XVIII con la labor iniciada por Claudio Linatti con su: “Trajes civiles, militares y religiosos de México”[3]). En esa serie se reconoce una gran influencia (que aún permanece) del trabajo realizado por los expresionistas alemanes del grupo Die Brücke[4] y, por supuesto, del trabajo realizado en México de manera especial con las propuestas iniciales que fincaron y dieron fortaleza al Taller de la Gráfica Popular[5].

En realidad, la serie de grabados tenía como fin brindarles un homenaje a ciertos personajes cotidianos, y a algunos otros “en peligro de extinción”, dentro de la urbe. Gran parte de mi producción tiene como elementos clave, y que son para mí de total inspiración: la experiencia o el carácter vivencial que se sostiene del recurso de la caricatura.

El primer elemento tiene mucho que ver, tanto el trabajo como la actitud, con lo que se identifica en el artista Edvard Munch[6], la constante atención a su presente representando episodios de sus propias vivencias, así como con toda la aportación y legado que dejó, en su experimentación y producción gráfica, la Maestra Käthe Kollwitz[7] que de manera única y con gran maestría deja un testimonio de su presente que incluye anécdotas personales de quien fuera considerada como una de las precursoras del expresionismo alemán.

En el caso de mi producción incluso, en determinados momentos, ha sido necesario la inclusión del autorretrato. A partir de las vivencias personales se pretende no solo formar una interpretación personal, autobiográfica, sino mantener la idea de que el espectador se pueda sentir también identificado.

En cuanto a la caricatura, tiene mucho que ver con la influencia (así es que podría considerarse como un homenaje a él) venida de Honoré Daumier[8] a través de su producción. De su gran legado en forma de litografías que sirvieron de ilustración para la prensa, su obra incendiaria y al mismo tiempo de gran humor, sabe ocupar a la caricatura como una herramienta de combate, hay un profundo respeto en la labor que hace el caricaturista, en tanto que: “El caricaturista difiere del pintor en un solo aspecto nomás, pero decisivo; fundamentalmente, no ve, sino que opina sobre lo que mira. No es imparcial; colabora, con su propia intuición y dice lo que piensa de lo que ha visto (…) el arte resulta más humano con caricaturas que sin ellas”[9]. Recordemos que incluso llegaron esas publicaciones a nuestro continente por medio de la prensa ilustrada y que fueron conocidas en México por José Guadalupe Posada y Manuel Manilla (por mencionar solo algunos) personajes que a la vez constituyen, también y sin duda, una gran referencia en una parte de mi producción gráfica.

“Él estudiando”. Xilografía 80 x 60 cm, 2005
“Él estudiando”. Xilografía 80 x 60 cm, 2005. Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©

De cierta manera, ha sido también una constante utilizada la relación que existe, en forma de alegoría, entre imagen y espejo y que se asocia por naturaleza al grabado –la capacidad de elección sobre la posibilidad de ofrecer una lectura partiendo de la dirección de la composición por la cual se tome preferencia. En algún momento me concentré en encontrar la mejor manera de ofrecer la imagen en el impreso, partiendo de variantes de una imagen considerando que pudieran presentarse alternativas distintas basadas en la dirección, ya sea izquierda o derecha, considerando la experimentación y la investigación constante de dos técnicas, por un lado, las posibilidades que ofrece el grabado en relieve y, por el otro, las cualidades linéales, así como lo ofrecido por el amplio discurso de la mancha relacionado con el grabado calcográfico, combinándolos siempre con el recurso del humor a través de la caricatura.

“¿Transporte seguro? I”. Xilografía y aguafuerte, 74 cm x 112 cm, 2011
“¿Transporte seguro? I”. Xilografía y aguafuerte, 74 cm x 112 cm, 2011. Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©
  1. El proceso
Captura de pantalla de publicación en FB personal con fecha de: 28/04/2020
Captura de pantalla de publicación en FB personal con fecha de 28/04/2020. Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©

Regresando al tema, la primera aparición de aquel autorretrato, hecho con acuarelas y pasteles grasos, fue lanzado por medio de mis redes sociales, un día después de su realización, el 28 de abril 2020 –dando una revisión a la publicación y de acuerdo con la fecha que incluye el dibujo (27 de abril 2020), en realidad, en un inicio, ese dibujo fue con dedicatoria especial a todas las personas que se dedican al diseño gráfico, ya que coincide con la fecha en la que se celebra el “Día Internacional del Diseño Gráfico”–, y fue nombrado, desde el principio: Home Office, debido a que, en términos generales y de forma mundial, ya era común el término –el confinamiento ya cumplía su primer mes en nuestro país y para todos comenzaba a ser cotidiana esa condición de vida que, por cierto, desde antes ya resultaba ser común no solo para los diseñadores, sino para todo aquel que ya antes estaba familiarizado con lo que se reconoce como freelance.

Lo que no sabíamos, es que se extendería tanto esta experiencia. Así pues, quedó registrado algo similar, en algunas páginas de mi actual cuaderno de dibujo familiar, un proyecto muy personal, algo así como la continuación de “Cuento para Mavy”, solo que ahora, este cuaderno documenta en sus páginas, el paso del tiempo, desde meses después del nacimiento de nuestra hija. La diferencia de éste, con respecto al anterior, es que, no es un ejercicio diario, sino que solo se consideran algunos días o eventos significativos que ameritan ser registrados, al mismo tiempo que sirve para seguir practicando y experimentado ciertas técnicas de dibujo.

Dibujo dentro del cuaderno familiar (finales de septiembre 2020), bolígrafo. Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©

Así, siguió pasando el tiempo hasta llegar a febrero de 2021, el panorama seguía igual, todos seguíamos en el “día de la marmota”[10] (y hay quienes todavía siguen en el confinamiento), decidí, entonces, que aquel dibujo ya ameritaba por su persistencia, ser llevado a otro discurso. Dada la naturaleza del dibujo, opté por realizar una primera interpretación usando también el pincel, la mancha. Así fue como realicé una versión en metal, con la técnica del azúcar, practicando métodos alternativos que de manera reciente me encontraba experimentando e investigando, como el proceso de grabado electrolítico que últimamente ha atrapado mi atención por los resultados que brinda y que son ideales para trabajar en el hogar, puesto que son métodos con menos riesgos para la salud.

Primer planteamiento con la técnica del azúcar, usando grabado electrolítico sobre lámina negra (febrero 2021)
Primer planteamiento con la técnica del azúcar, usando grabado electrolítico sobre lámina negra (febrero 2021). Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©

Después de obtener la primera mancha (resultado del azúcar), el mismo proceso de experimentación me motivaba a seguir dándole rienda suelta a la manipulación e intervención del dibujo, así comenzaron a agregarse valores tonales a manera de aguatintas con lo que entonces aparecerían nuevos elementos, como las moscas merodeando alrededor de la cabeza. El mismo proceso iba dictando y sugiriendo la descomposición, como si se estuviera pudriendo o desapareciendo… toda esa magia que tiene el grabado, de ser “lo contrario” y que viene de la incertidumbre. Por ejemplo, la aplicación de la laca negra a través de un pincel constituye las luces, así pues, surge una paradoja más de la gráfica, entender en el proceso al negro como un valor de luz que se va transformado y modificando, es decir, todo eso que no se tiene con entera certeza y que surge hasta que se da la impresión.

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Registro de proceso de los 4 diferentes atacados de aguatinta que tuvo la placa de metal
Registro de proceso de los 4 diferentes atacados de aguatinta que tuvo la placa de metal. Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©

Así fue como logré obtener un primer planteamiento, además de una composición distinta al dibujo original, planteamiento que ya quedaba cubierto con este primer resultado, además de significar también una vuelta al tiempo, pero también de ser parte de una producción que cumple dos funciones, un grabado con un fin en sí y como un medio para otro fin… Es decir, desde el momento en el que decidí hacer esta versión en metal, usando el método electrolítico, sabía que su resultado me serviría como un proceso, como base para crear otro grabado.

Plancha de metal (matriz)
Plancha de metal (matriz). Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©
Impreso “home office” c/t de grabado electrolítico (técnica mixta) 33cm x 23 cm, febrero 2021
Impreso “home office” c/t de grabado electrolítico (técnica mixta) 33cm x 23 cm, febrero 2021. Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©

El paso de los días continuaba, seguían apareciendo nuevos dibujos en el cuaderno familiar, a pesar de ser un presente eterno sí hubo modificaciones en el entorno. A esas alturas fue necesario para muchos conseguir otro equipo de cómputo con mayores capacidades para seguir trabajando desde casa. A un año de aquel dibujo del Home Office, mi lugar de trabajo ya no parecía una esquina improvisada de la casa, ya tenía una “personalidad” propia, el lugar de trabajo se fue acondicionando para hacer más ligera la realidad, de manera espontánea comenzaba a relucir la “felicidad Godínez” y el toque kitsch generacional, así se fueron acomodando en el espacio el Halcón Milenario[11] y los Hot Wheels[12] favoritos, por ejemplo.

Dibujo dentro del cuaderno familiar / tinta china (abril 2021)
Dibujo dentro del cuaderno familiar / tinta china (abril 2021). Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©
Dibujo dentro del cuaderno familiar / tinta china (abril 2021)
Dibujo dentro del cuaderno familiar / tinta china (abril 2021). Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©

En esta imagen podemos ver de manera más clara cómo es usado el grabado “como un medio para otro fin” ya que el resultado del grabado electrolítico, nos presenta la lectura de inversión de la imagen original, por consecuencia, serviría este resultado para obtener, en esta segunda versión, ahora sí, una composición con la dirección original que se proponía en el dibujo, solo que esta segunda versión sería tratada con la técnica de la xilografía, y se agregarían las modificaciones que el entorno había experimentado en el tiempo considerado, para ello se utilizó uno de los dibujos del cuaderno familiar donde quedó documentado el entorno y se sometió a una calca en papel vegetal, con el fin de obtener una composición invertida.

Detalle de una placa y el tórculo
Detalle de una placa y el tórculo en el Taller Chaparrancho

Un elemento clave que le dio contundencia a la propuesta final, a esa idea de cartel que tanto buscaba, se dio de manera espontánea, es decir, como parte importante del proceso resultaba ser la cotidianidad y por la forma en que estaba involucrado yo con el tema, de repente todo tuvo relación. De esta manera, la aparición de la casita que enmarca la composición final, estaba acentuada a partir del lema que por todas partes sonaba y sonaba: “Quédate en casa”, ese logo ya lo tenía entre ceja y ceja, sin embargo, el estar con mi hija, me hizo prestar atención a otras cosas, como esos momentos en que ponía en YouTube algunos videos para distraernos, por ejemplo, veíamos videojuegos, y de manera específica tengo mucho agrado por el juego Mappy[13], ¡ese acabado de las tejas debía de ser aplicado a la madera!

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Ícono “home” de Facebook
Fragmento de videojuego: “Mappy”
Fragmento de videojuego: “Mappy”
Detalle de videojuego: “Mappy”
Detalle de videojuego: “Mappy”

Teniendo todos los elementos en la debida disposición, las condiciones se presentaron para que, en abril del 2021, estuviera centrando toda mi atención en este proyecto, a un año de aquel dibujo, el mensaje ya debería tener una mayor dimensión y una mejor contundencia, solo fue necesario seguir viviendo el presente, seguir en el personaje.

La realidad siempre supera a la ficción. Quedó también como experiencia algo verídico que tuvo que ver con las variaciones de voltaje y las condiciones vulnerables que algunos padecemos en nuestros hogares, por el exceso de uso del ordenador, en mi caso, más de una vez se descompuso el CPU y se tuvo que reparar, así mismo, fue necesario reacondicionar la instalación eléctrica casera.

Detalle del regulador de voltaje
Detalle del regulador de voltaje. Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©

Cuando me encontraba en las sesiones de proceso de talla (en lo personal, uno de los procesos que más disfruto en el grabado), fue determinante otra experiencia que confirmaba mi sentir y la percepción del encierro, en relación con la xilografía que estaba trabajando, en una de las salidas que fueron necesarias y que tuve que hacer con mi familia para conseguir la despensa semanal, mientras en compañía de mi hija esperábamos afuera del supermercado, que está ubicado dentro de una plaza comercial en Taxco de Alarcón, algo –y que parecía que en ese momento estaba para mí, en un rincón de esa plaza– llamó mi atención de manera automática, unas escaleras que se me ofrecieron desde una vista surrealista… terminaría con ello por confirmar el sentido de la composición y del cartel, ¡Todo estaba conectado!

Escaleras en la plaza comercial
Escaleras en la plaza comercial (Vista que se ofrece al ascender)
  1. Resultados, consecuencias y notas

Puedo asegurar que la xilografía es, sin duda, mi técnica favorita, la que me ha dado mucho, la que cubre mis necesidades de creación –porque, además, se parte de destruir para construir–, la que me pone en contacto con el material, a través del corte de la navaja, de la acción de tallar y de extraer el material; la inmediatez de la acción, técnica que además exige energía y el uso de todo el cuerpo, no solo el de la mano[14]; que ofrece la sensación de ver cómo el dibujo se convierte en otra cosa. El tocar los relieves se vuelve algo tan cercano al lenguaje escultórico; modelar el espacio; oler la madera; ser responsable y testigo de la transformación del material…, es mágico, es espiritual también, pero, sobre todo, es muy vigente y, a pesar de seguir durante años sobre la misma técnica, el sentido de sorpresa y de incertidumbre persiste, está asociado en la naturaleza del triplay de pino, en las betas de la madera, que es tan noble, y en su textura, que le ofrece mucho al impreso; el juego de gubias se convierten en extensiones de la mano, del cuerpo ¡vamos! el mismo lápiz o la tiza con los que se comienza por proponer los trazos, todo en sí. Esta imagen exigía, al igual que “Classroom”, la contundencia total y única que tiene, por excelencia, el grabado por la absoluta riqueza de lenguaje que posee; por el carácter monocromático de la tinta negra sobre el papel.

Plancha de madera / triplay de pino (matriz) “El home office” 100cm x 65cm
Plancha de madera / triplay de pino (matriz) “El home office” 100cm x 65cm. Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©
Xilografía: “El home office” impresa sobre papel 100% algodón 120 cm x 80 cm
Xilografía: “El home office” impresa sobre papel 100% algodón 120 cm x 80 cm. Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©

Y así es como se presentan ambos resultados, arriba tenemos casi completa la imagen que corresponde a la matriz (triplay de pino) y abajo el resultado final, una impresión que, en este caso, corresponde a una copia de taller (C/T).

Después de este resultado, el tiempo siguió avanzando. Congelando ese mismo presente se logró una versión posterior, fue necesario hacer un final e inmortalizar a este personaje que cada día muere frente al monitor tratando de dar lo mejor y persistiendo a pesar de la adversidad… Así llegó noviembre de 2021, mes con el que se conmemora a nuestros Fieles Difuntos, pero en el que, dada la persistente condición de vida del confinamiento frente al monitor, fue necesario gritarle al mundo “no lloren por mí, yo ya estoy muerto”[15]. Fue así como el grabado se convirtió también en un medio para otro fin.

“El home office” xilografía, medidas de impresión: 100 x 65 cm 2021
“El home office” xilografía, medidas de impresión: 100 x 65 cm 2021. Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©
“No lloren por mí, yo ya estoy muerto” / 2020 2021 El home office xilografía, medidas de impresión: 112 cm x 60 cm 2021
“No lloren por mí, yo ya estoy muerto” / 2020 2021 El home office xilografía, medidas de impresión: 112 cm x 60 cm 2021. Jorge Fanuvy Núñez Aguilera ©

A estas alturas, si el lector ha seguido de manera detenida este escrito, conviene de nuevo retomar solo algunas notas iniciales que provienen de “Classroom”, y que también son aplicadas para esta segunda entrega. Lo que se ha compartido no tiene nada que ver con la imposición de un sistema, un “modo de hacer” o, peor aún, con una receta, el panorama actual de posibilidades en la gráfica es inmenso, todo lo que se está gestando en este campo tiene mucho potencial y está saturado de una diversidad de posturas. Tampoco se pretende revivir la polémica latente y el mito creado, que relaciona de manera rigurosa al dibujo con el grabado, no se trata de imponer dogmas rígidos que tienden a menospreciar otro tipo de posturas, tan válidas dentro de la gráfica contemporánea –en tanto el dibujo poco tiene que ver con los resultados que nos revela el impreso–, en realidad se trata de mostrar cómo estas maneras, en el terreno de la experimentación, investigación y producción son realmente propositivas. En este sentido, todo es válido y útil, contemplando lo espontáneo, la casualidad, el azar, la negación a lo representativo, la abstracción, el uso de plataformas digitales, etc.[16]

La preocupación medular de este ensayo es compartir la disección de una imagen más allá de la utilización de términos extravagantes, en dado caso, y hacer notar lo importante que es conjuntar, en el proceso creativo: la vida con el arte, en este caso, agregando como ingrediente importante el humor y el poder de la caricatura.

“La caricatura como todo trabajo satírico, ha sido siempre un arma ofensiva en todos los sentidos de la palabra: ataca y busca ofender (…) ésta pertenece al género de los excesos y, para asegurar su eficacia, subversiva, y cuando el sujeto lo amerita, debe incluso tornarse despiadada y cruel, violenta, intolerante y grosera. No mata, pero hace escarnio de su presa”[17]

La obra “El home office” exhibida en el Museo Nacional dela Estampa en la Ciudad de México
La obra “El home office” exhibida en el Museo Nacional dela Estampa en la Ciudad de México, 2022

Con relación a las consecuencias que “el Home Office” ha tenido a la distancia de un año de su presencia, se ha reconocido, de manera aceptable, como una modalidad más de empleo en nuestro país. A través de la presencia que esta pieza ha tenido desde diciembre 2021 dentro de la exposición colectiva: “Mano de obra, oficios en la gráfica mexicana del siglo XX y XXI”, presentada en el Museo Nacional de la Estampa de la Ciudad de México[18], la acción queda por completo conectada con los primeros antecedentes ya mencionados en este escrito.

Por mi parte, el trabajo cotidiano de la oficina en casa va quedando en el pasado y, a pesar de lo representado, estoy seguro de que será un tiempo que extrañaré mucho, dos años que atesoro con gran afecto. 

[Publicado el 5 de mayo de 2022]
[.925 Artes y Diseño, Año 9, edición 34]

Referencias:

  • Carrasco Puente, R. (1953). “La caricatura en México”. Imprenta Universitaria. México.
  • Barajas, R. “El Fisgón” (2000). La historia de un país en caricatura. Caricatura mexicana de combate. CONACULTA arte e imagen. México.

[1] La COVID-19 es la enfermedad causada por el nuevo coronavirus conocido como SARS-CoV-2. La OMS tuvo noticia por primera vez de la existencia de este nuevo virus el 31 de diciembre de 2019, al ser informada de un grupo de casos de “neumonía vírica” que se habían declarado en Wuhan, República Popular China.
[2] En el año 2004 fue presentado este resultado por medio del Examen Profesional de Titulación como parte de la producción e investigación realizada dentro del IX Seminario de Libro Alternativo a cargo del Dr. Daniel Manzano Águila (ENAP-UNAM).
[3] Claudio Linatti (Carbonera, 1790 – Tampico, 1830). Pintor y litógrafo italiano, considerado el padre de la litografía mexicana. Creador de la publicación: Trajes Civiles, Militares y Religiosos de México, fechado en 1828 y consta de 49 litografías pintadas a mano.
[4] Die Brücke (El Puente) es la tendencia artística de un grupo de pintores alemanes expresionistas reunidos en Dresde entre 1905 y 1913.
[5] El Taller de Gráfica Popular es un colectivo de grabadores fundado en México en 1937 por los artistas Leopoldo Méndez, Pablo O'Higgins y Luis Arenal Bastar. La meta del colectivo era utilizar al arte para fomentar las causas sociales revolucionarias
[6] Edvard Munch (1863 – 1944), pintor y grabador noruego, precursor del expresionismo alemán de comienzos del siglo XX.
[7] Käthe Kollwitz (1867 – 1945), grabadora, pintora y escultura alemana, una de las figuras más populares del arte alemán
[8] Honoré Daumier (1808 – 1879), Caricaturista, pintor, escultor, dibujante uno de los artistas más importantes y populares del realismo francés.
[9] Carrasco Puente, R. (1953). “La caricatura en México”. Imprenta Universitaria. México. pp. 21, 23.
[10] Groundhog Day. Dir. Harold Ramis, Estados Unidos, 1993. Conocida como: “El día de la marmota”.
[11] El Millennium Falcon o Halcón Milenario es una nave espacial ficticia, perteneciente al universo de la serie de películas Star Wars.
[12] https://play.hotwheels.com/es-mx/index.html
[13] Mappy es un videojuego publicado en 1983 por Namco.
[14] Uno de los principios fundamentales que el Maestro pintor-grabador: Pedro Ascencio Mateos, plantea en sus lecciones al iniciado en la xilografía
[15] “No lloren por mi estoy muerto” es una frase original que proviene del personaje Barney Gómez de los Simpson, capítulo «A star is Burns» de la sexta temporada, conocido también como el de la «bola en la ingle»
[16] Consultar: “Un año no pasa en vano. Una reflexión en torno a Classroom” publicada dentro de: revista925taxco.fad.unam.mx
[17] Barajas, R. “El Fisgón” (2000). La historia de un país en caricatura. Caricatura mexicana de combate. CONACULTA arte e imagen. México, pp. 18 y 19.
[18] Dentro de la exposición “Mano de obra, oficios en la gráfica mexicana del siglo XX y XXI” se presenta, además de la obra mencionada en este texto, otra versión sobre el mismo tema, muy interesante, con la técnica calcográfica mixta (aguafuerte y aguatinta en cobre): “home office”; realizada por Eunice Ortiz Pérez. Notas sobre la exposición: https://www.jornada.com.mx/2022/03/22/cultura/a05n2cul

Mtro. en Artes Visuales (ENAP UNAM), Lic. en A.V (ENAP UNAM). Actualmente académico de la FAD UNAM Taxco impartiendo clases de Dibujo y grabado a los alumnos de Licenciatura de Artes Visuales y Arte y Diseño, laborando en Difusión Cultural dentro del mismo plantel. 8 exposiciones individuales en el país, 2017 fue beneficiario del Programa de Estímulos a la Creación y Desarrollo Artístico, Guerrero (PECDAG). Más de 50 exposiciones colectivas, su obra ha sido seleccionada en diversos concursos y bienales tanto a nivel nacional e internacional.

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